El próximo 26 de abril, Hevia presentará el HEVIA TRÍO en un concierto especial en el Auditorio Joaquín Rodrigo de Las Rozas, donde recorrerá 25 años de su trayectoria musical. Con su innovador enfoque en la fusión de instrumentos acústicos y electrónicos, promete una experiencia íntima y única que transformará cada nota en una historia en directo.
Orgulloso roceño desde hace 25 años, Hevia invita a todos los amantes de la música tradicional a disfrutar de una velada en la que tradición e innovación se unen. Este concierto es una cita ineludible para quienes buscan sumergirse en el vibrante universo sonoro del artista y descubrir nuevas perspectivas en la música asturiana.
Empezamos con una pregunta obligatoria… ¿Qué tal se vive en Las Rozas?
Soy un orgulloso roceño desde hace 25 años. Vivo en Las Rozas y he tenido la suerte de haber tocado ya en el Joaquín Rodrigo hace unos cuantos años, en aquel festival de folk de invierno que se organizaba en la ciudad. Mi residencia está aquí, me encuentro muy bien, me siento muy querido y muy a gusto entre los roceños.
Después de tantos años de trayectoria, ¿cómo definirías la evolución de HEVIA y cuál consideras que ha sido el secreto de un éxito tan prolongado?
Si supiera eso… Es una fórmula que no existe, no hay una fórmula matemática que considere el éxito en la música. Pero en mi caso, considero que es poder vivir de la música y hacerlo desde un escenario. Para mí, vivir de la música fue una meta desde muy joven y vivir de los escenarios fue algo que logré hace ya 27 años. Y en eso sigo, sí que lo considero un éxito laboral que identifico con mi carrera.
Ahora bien, si te tuviera que describir la vida de un músico profesional en este país, te lo digo rápidamente. Son veinte años luchando para poder vivir del escenario y otros veinte años luchando para dejar de vivir del escenario.
«La vida de un músico se define por veinte años de lucha para vivir de los escenarios y otros veinte para dejar de hacerlo»
El próximo 26 de abril, el HEVIA TRÍO se presentará en nuestra ciudad. ¿Qué pueden esperar los asistentes de este concierto y en qué se diferencia de vuestros espectáculos anteriores?
Haremos un repaso a los temas de estos 25 años desde una óptica reducida. Es un trío en el que hay un piano, percusiones, que toca desde siempre mi hermana María José, y yo estaré con las gaitas acústicas, las gaitas electrónicas y las flautas. Pueden esperar sobre todo que yo les cuente una historia a través de la música.
Será una historia contada a través de música tradicional, de la de transmisión oral. Eso es lo que intento trasmitir en mis conciertos siempre. Este tipo de música va siempre parejo a una serie de historias que hay que introducir en el escenario y hay que hacer que suenen en su propio universo. Es muy importante, además, que esta tradición oral no se pierda.

Esa es en parte la idea de este nuevo disco PLATINUM EUROPE AWARD. 25 Aniversario, en el quese revisitan 10 de vuestros temas más populares. ¿Qué elementos han decidido conservar y qué innovaciones han incorporado en estas reinterpretaciones?
El 25 Aniversario consiste en revisitar los temas con los que estamos girando desde hace 27 años, pero hacerlo desde la óptica propia del directo. Es un disco en el que estamos la full band completa. En el concierto de Las Rozas tendremos, como se dice en el mundo de la música, una formación más intimista y más directa. Más cercana al tú a tú con el público.
El empleo de la loop station es un elemento clave en este proyecto. ¿Cómo surgió la idea de utilizar esta herramienta para recrear el sonido de las legendarias agrupaciones de romerías?
Lo estoy utilizando sobre todo a partir de la pandemia. Empecé con ello en casa y es una gran herramienta para hacer música cuando te encuentras solo. Los músicos tradicionales, es normal que toquemos varios instrumentos; gaitas, flautas, acordeón, percusiones… Evidentemente no podemos tocarlo todo a la vez, así que con este loop station vas pudiendo realizar esas construcciones a base de grabar pistas.
«La imagen es un elemento imprescindible para contar historias sobre el escenario»
En cuanto al videoclip, BUSINDRE REEL 25, fusiona imágenes de la Asturias del siglo XX con vuestra música. ¿Cómo integrasteis los elementos visuales y sonoros para lograr una conexión tan especial?
Durante los conciertos suelen acompañarnos unas proyecciones en la pantalla que llevamos detrás, con objeto de poder complementar la música con el punto de vista de las historias que te decía. No es lo mismo tocar un tema que procede de una danza ritual, que se produce en determinada época del año, si no lo acompañas con ese componente visual con vídeos o fotos. No sería igual tocarlo sin más. El tema puede resultar muy sugerente, muy bonito, muy atrayente, muy valorable desde el punto de vista musical, pero me gusta, si puede ser, aprovechar toda esa historia que hay detrás. Las imágenes nos ayudan mucho en esta cuestión.
Hace 27 años viajó de Asturias a Madrid para grabar un disco y desde ahí, creo que cambió su vida. ¿Cómo ha evolucionado desde aquella experiencia hasta hoy?
Como evoluciona cualquier profesional en su terreno. Cuando bajé a Madrid venía con mucha ilusión, mucha música hecha, porque ya tenía un trabajo realizado de quince años detrás. Pero al mismo tiempo traía detrás también bastante ignorancia respecto a la industria musical de entonces. Sobre todo del mundo discográfico. Es algo que se ha reconstruido radicalmente desde entonces. Evolucionas adaptándote y aprendiendo que no solamente la técnica musical es necesaria, sino también ese tipo de conocimientos.
«La música tradicional siempre se abre camino»
Parece complicado, desde el punto de vista de la música tradicional, conectar con los jóvenes en el momento actual…
En cualquier momento de la historia de la música ha habido tendencias que han marcado la industria, pero la música tradicional siempre se abre camino. Puede que no estemos en un pico, que no sea una moda. Es posible que estemos en un fondo de valle, pero a mí me gusta medir los fenómenos por los fondos de valle, no por los picos. Si atendemos a eso, estamos mucho mejor de lo que estábamos en los años 70, cuando yo empecé a tocar la gaita.
Ahora mismo hay escuelas de música tradicional por toda España. Los instrumentos están cuidados, se estudian en los conservatorios… Hay muchos jóvenes que se acercan a este tipo de música, especialmente en las ciudades de provincias. Ha pasado también de ser un fenómeno rural a ser un fenómeno urbano. Yo soy muy optimista, lo que pasa que el gran público conoce a algún artista de este ámbito de cuando en cuando. Seguramente llegará algún fenómeno, no sé si en breve o tardando mucho, pero cuando llegue al conocimiento del gran público, será porque hay todo este trabajo detrás.

Estás dando conciertos, ahora tienes un breve parón, pero pronto seguirás… ¿Cómo estás experimentando esta gira?
Esto para nosotros es nuestro día a día desde hace tantos años… Siempre fui un artista que no hacía giras de 20 o 30 conciertos seguidos, fuera de casa, sino que habitualmente hago dos, tres conciertos, por aquí o en Italia, después regreso a casa y lo llevo como mi día a día, la verdad.
Sí… te escuché comentar hace poco que llevas de gira 27 años…
Como te digo es una gira bastante escalonada. Una semana en Italia con tres conciertos y volvemos a casa. Estás tres semanas en casa pero sales para hacer un concierto en Valencia… Vuelves… Así nos mantenemos durante todo el año.
«El folk celta me ha acompañado toda la vida»
¿Qué estas componiendo ahora mismo?
Siempre estoy componiendo. Cuando estoy en casa, dedico habitualmente unas cuantas horas al estudio. Lo que ocurre es que de todo eso que sale día a día, yo siento no tener el don de que todo sirva y sea bueno, así que, compongo, lo aparco y lo rescato unos meses después. Hay cosas que después ves que merecen la pena y otras que solo son producto de una tarde de imaginación, menos aprovechable. Trabajar día a día es siempre necesario.
¿Cómo describirías un poco más a fondo ese proceso de escritura de música?
Yo al menos, desde la música tradicional suelo componer bastante al revés que como se componen otro tipo de músicas, desde el pop a la música sinfónica, incluso. No arranco de una base y voy construyendo hacia arriba. Se puede decir que la música tradicional está concebida desde el tejado, desde la melodía. Con una melodía de gaita vas adaptando el acompañamiento, llegas después al bajo y, por último a las percusiones, que ya están muy definidas y marcadas por ese tipo de melodías.
Cuando tocas una melodía de dulzaina o de gaita hay unos patrones rítmicos subyacentes y ya sabes lo que va a resultar después. Ese es el proceso.

¿Qué música escucha HEVIA en 2025?
Soy demasiado ecléctico como para decirte algo. Escucho lo que me cuadra en cada momento. Ahora mismo escucho muchos tangos argentinos clásicos y revisitados con mucha maestría, por cierto. Pero la semana que entra puedo volver a escuchar folk del ámbito de la música celta, que también es una cosa que me ha acompañado siempre. Quizá sea lo más definitorio en mi trayectoria, escuchar ese tipo de música de los países atlánticos.
Y ya para terminar, ¿qué planes tienes de cara a futuro para seguir innovando y difundiendo la música tradicional asturiana?
Siempre te parece que el proyecto que tienes en cartera, en el que estás trabajando, es el más ilusionante, y a así tiene que ser. Si no, no continuarías mirando al futuro. Lo que estoy haciendo ahora es esa mezcla de la tecnología con el loop station y temas muy tradicionales, creados a partir de un par de pistas grabadas. Después evolucionan para ser tocados por la full band, con arreglos modernos, con bajo eléctrico… Quiero que el público sea consciente que los temas van creciendo a partir de una melodía, casi como si estuvieras componiendo en el propio escenario. En eso estoy trabajando.