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Las Rozas de Madrid
/ 16 septiembre 2024

Tres voluntarias de Las Rozas encabezan una campaña para mejorar un orfanato infantil en Kenia

Tres voluntarias de Las Rozas encabezan una campaña para mejorar un orfanato infantil en Kenia

Lucía, Mencía y Lucía son tres voluntarias roceñas que han decidido, a través de un orfanato local, encabezar una noble causa en Kenia, con el objetivo de mejorar las condiciones de vida, seguridad y educación de 60 niños y niñas.

Entre las mejoras que desean implementar se encuentran la renovación de las 50 camas de los pequeños, la compra de proteína para asegurar una dieta adecuada y el traslado de los niños en situación de discapacidad a un colegio especializado. Además, planean la reparación de la pared exterior del orfanato y la instalación de una bomba de agua con canalizaciones para garantizar acceso a este recurso.

Su iniciativa cuenta con el respaldo de la ONG “Children of Kenya”, que se dedica a proporcionar asistencia y recursos a comunidades vulnerables en el país africano. Sin embargo, para hacer realidad su ambicioso plan anual 2024, también necesitan fondos, para lo que ya han comenzado con su recaudación.

Cualquier donación puede cambiar la vida de los niños

La gestora del proyecto, Mencía, explica que cada donación, por pequeña que sea, se traduce en una mejora significativa en la calidad de vida de estos niños. «Nuestro objetivo es asegurarnos de que tengan un entorno seguro y saludable donde puedan crecer y aprender», enfatiza. Estas mejoras no solo beneficiarán a los menores, sino que también contribuirán a crear un ambiente más propicio para su desarrollo integral.

El compromiso de las voluntarias va más allá de la recaudación de fondos; buscan generar conciencia sobre la situación en la que viven estos niños y la necesidad de apoyo global. «Queremos que la gente sepa que con su ayuda podemos hacer una gran diferencia. Cada pequeño gesto cuenta», afirma Lucía, una de las voluntarias. La difusión del mensaje se convierte así en un componente esencial para alcanzar sus metas.

El equipo de voluntarias ha subrayado que, con el apoyo de la comunidad y la generosidad de aquellos dispuestos a ayudar, están convencidas de que podrán llevar a cabo el plan de acción 2024 y cambiar la vida de estos niños, quienes sin duda merecen lo mejor. «Estamos agradecidas por cualquier ayuda que podamos recibir», concluyen.

Lucía, Mencía y Lucía son tres voluntarias roceñas que han decidido, a través de un orfanato local, encabezar una noble causa en Kenia, con el objetivo de mejorar las condiciones de vida, seguridad y educación de 60 niños y niñas.

Entre las mejoras que desean implementar se encuentran la renovación de las 50 camas de los pequeños, la compra de proteína para asegurar una dieta adecuada y el traslado de los niños en situación de discapacidad a un colegio especializado. Además, planean la reparación de la pared exterior del orfanato y la instalación de una bomba de agua con canalizaciones para garantizar acceso a este recurso.

Su iniciativa cuenta con el respaldo de la ONG “Children of Kenya”, que se dedica a proporcionar asistencia y recursos a comunidades vulnerables en el país africano. Sin embargo, para hacer realidad su ambicioso plan anual 2024, también necesitan fondos, para lo que ya han comenzado con su recaudación.

Cualquier donación puede cambiar la vida de los niños

La gestora del proyecto, Mencía, explica que cada donación, por pequeña que sea, se traduce en una mejora significativa en la calidad de vida de estos niños. «Nuestro objetivo es asegurarnos de que tengan un entorno seguro y saludable donde puedan crecer y aprender», enfatiza. Estas mejoras no solo beneficiarán a los menores, sino que también contribuirán a crear un ambiente más propicio para su desarrollo integral.

El compromiso de las voluntarias va más allá de la recaudación de fondos; buscan generar conciencia sobre la situación en la que viven estos niños y la necesidad de apoyo global. «Queremos que la gente sepa que con su ayuda podemos hacer una gran diferencia. Cada pequeño gesto cuenta», afirma Lucía, una de las voluntarias. La difusión del mensaje se convierte así en un componente esencial para alcanzar sus metas.

El equipo de voluntarias ha subrayado que, con el apoyo de la comunidad y la generosidad de aquellos dispuestos a ayudar, están convencidas de que podrán llevar a cabo el plan de acción 2024 y cambiar la vida de estos niños, quienes sin duda merecen lo mejor. «Estamos agradecidas por cualquier ayuda que podamos recibir», concluyen.

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